Rissani مولاي عالي الشريف

Lejos del ajetreo de las grandes ciudades, Rissani es la puerta al desierto para muchos mercaderes. Durante varios días a la semana se organizan los mercados de animales.Ovejas y burros invaden la ciudad y nos trasladan al pasado como si de nuestro abuelos se tratara.

En la entrada se encuentran las ruinas de adobe de la antigua Sjilmassa, fundada en el siglo VII, que formaba parte de las rutas de caravanas hacia Mali, Niger y Ghana, reconstruida por Muley Ismail. Fue destruidapor las tribus berebers de los Ait Atta. Rodeando las ruinas por un paseo llegamos a la entrada de la ciudad, bellamente decorada con una puerta monumental.

Lugar de nacimiento de la actual dinastía Alaoui se venera la tumba zaouia visitable, de su fundador Moulay el Cherif , situada en una gran plaza, a la derecha el Ksar Aber, fortaleza del siglo XIX. A 1 Km a la derecha de la zaouia, encontramos el Ksar Oulad Abdlhalim, del 1900, llamado antiguamente “la Alhambra del Tafilat”en ruinas.

En la ciudad abundan los zocos, jueves, domingos y martes. A destacar la kasba de  Abou Am y su animado zoco, donde se pueden encontrar los apreciados dátiles Majhoul del Tafilalet, la artesanía de la región, con las joyas del sur, objetos rústicos, los pañuelos bordados Jaiques, mantas y gran variedad de fósiles.

De esta región del Tafilalet es originaria la  música Malhun que seextendió por las medinas de las ciudades imperiales, en el entorno de los gremios artesanales.Poética a más no poder, canta al más alto valor humano y al amor, mientras evoca al Profeta. El cantante e intérprete de laúd, El-Hadj Houcine Toulali, cuyas primeras grabaciones datan de los años cincuenta, es quien mejor encarna el arte del malhun.